Desde que llegó a la presidencia su vida ha sido atacar a quien considera su enemigo político, al no tener se lo inventa.
Por Alcides Herrera
Ha despotricado casi todos los días contra los diputados de oposición, el FMLN, la Sala de lo Constitucional, el Fiscal General, el procurador de Derechos Humanos, organizaciones de Mujeres, medios de comunicación y periodistas, la empresa privada, etc. Ha regañado hasta al pueblo. Se le están acabando sus fantasmas y ahora la agarra contra la UCA.
Ha difamado a países como Guatemala, Mexico, Italia, Costa Rica, no le ha importado mentir sobre Estados Unidos, etc.
Las rabietas son tantas como para escribir un libro. Alguien lo ha de estar escribiendo ya. Ha llamado malditos, delincuentes, asolapados, pseudo periodistas, pseudo empresarios a quien se le ponga enfrente. Sus achichincles le llamaron a los jesuitas “asolapados”. A los magistrados de la Sala, tinteros de “firma y sello”.
No le importa mentir, difamar, calumniar, insultar. Hace las peores bajeradas y no le cuesta mucho mostrarse con malas intenciones y vivianadas contra sus adversarios. El no tiene ley, no hay institucionalidad. La democracia la reduce al apoyo en las encuestas.
¿Es tan infalible el presidente que todo mundo está equivocado excepto él y su gobierno?
El Bukele de hoy es muy distante al Bukele antes de ser presidente. Algo le pasó en el camino. Cuando creemos que va a demostrar que vale la pena, es cuando vuelve “a meter la pata”.
Después del desplante que hizo su gobierno, viene el ataque a la UCA. Tiene miedo de que lo investiguen, quien llegó a la presidencia con la crítica a los corruptos.
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